La yerba mate de molienda gruesa está ganando lugar tanto en las ferias francas como en las góndolas de supermercados. Sus elaboradores la destacan como una alternativa especial para la preparación del tereré o mate frío (como se conoce fuera del Litoral argentino).
Hace unos diez años eran muy pocas las marcas que ofrecían esta variante, también conocida erróneamente por el público como yerba canchada. La diferencia está en que a la yerba canchada (materia prima de los secaderos) se la estaciona por varios meses y luego se le hace un corte grueso para su venta al público.
Tanto en bolsas transparentes como en paquetes de papel o laminados, la yerba mate para tereré creció en oferta tras la búsqueda de los consumidores.
Entre sus virtudes se destaca que al tener menos polvo, la bombilla se tapa menos y permite pasar por más tiempo su sabor a los jugos o mezclas de frutas que se le añaden.
También se recordó por parte de las yerbateras que hay consumidores que buscan la yerba para tereré, pero para su consumo tradicional, porque aseguran que es más suave y no les provoca acidez.
En general la mayoría de las empresas o molinos yerbateros lanzaron sus variantes de tereré hace unos cinco años, aunque hubo varios que estrenaron paquetes en el pasado año.
Desde el sector tienen esperanza de que el consumo de tereré pueda ser una alternativa al consumo de bebidas envasadas, principales competidoras de la infusión nacional en el mercado interno.